sábado, 6 de febrero de 2016

Almudena Grandes: Los besos en el pan. Por Jesús Ángel Rodríguez

Grandes, Almudena: Los besos en el pan. Tusquets, Barcelona, 2015. 327 páginas. Comentario realizado por Jesús Ángel Rodríguez.

Se lee fácil, muy fácil, te engancha desde la primera historia. Es una novela construida a base de pequeños relatos. Poco a poco vamos a ir conociendo las vidas de las distintas personas que viven, malviven o, simplemente, sobreviven en un barrio de Madrid. La ubicación del barrio es accesoria, de hecho, hasta el final no da unas coordenadas un poco más concretas, podría ser de cualquier ciudad española. Como te puedes imaginar, al vivir todos en el mismo barrio las historias están conectadas unas con otras, el nexo es el barrio. Es como una mancha de aceite, que se va extendiendo poco a poco, que primero toca a los más cercanos y, poco a poco, llega a las historias más lejanas.

Son historias acerca de la crisis económica que llevamos padeciendo desde hace ocho años. Todos están afectados. Desde la familia que vuelve de vacaciones con la amenaza de que le recortan el sueldo a él y el miedo de que despidan a la mujer. La peluquera y el dueño del bar que hacen malabares para no tener que despedir a ningún trabajador y encima ayudar a la familia y al vecindario. El recién divorciado que ha perdido el trabajo y la familia (por este orden) y tiene que volver a vivir con sus padres. Las chinas que son explotadas en una tienda de manicuras. El ama de casa que gasta a manos llenas hasta que su marido le hace “un corralito a su tarjeta”. Una que me ha encantado es la de la abuela que juega por internet un juego (no sabemos si es de rol o un arcade). También hay historias de amor muy bonitas, una de ellas, la que está al final del libro, me ha dado pistas de cómo actuar si se me presenta una situación similar (y no digo nada más, que luego todo se sabe). Historias de superación, de intentar “re-inventarse”, de dolor y de coraje, sobre todo de coraje.

No es políticamente neutra, su autora no lo es. Hay una crítica a los recortes de los últimos años. También es cierto que se queda en una crítica un poco simple, la gente se duele de sus males pero no es capaz de hacer un análisis de la situación. Hay mucha rabia e indignación. Es cierto que retrata muy bien las conversaciones de la gente sobre la crisis. Si alguien se pregunta el motivo del viraje electoral de los años 2014 y 2015 tiene la explicación en este libro. Es la opinión de la gente de la calle. Como la autora (según tengo entendido) no es creyente, ignora toda la ayuda y solidaridad que han surgido en las parroquias, donde mucha gente ha ido a pedir ayuda, lo cual he echado en falta en la novela.

Hay dos historias que son un poco irreales. Una que un trabajador se queda con el negocio al jubilarse el dueño y que no cobra porque dedica el dinero del despido para pagar el traspaso, pero que mantiene a su familia ¿?. La otra historia es de niños que pasan hambre; es muy bonita, muy tierna, se escandalizan de que eso pase en el centro de Madrid, que si fuera en Vallecas sería más normal. Lo cierto es que en Madrid nadie ha pasado hambre durante la crisis, hay suficientes comedores sociales, hay parroquias y asociaciones donde se forman largas colas para ir a buscar alimentos. Mucha gente pasa necesidad, pasa frío, gente que malvive, pero no conozco ninguna persona que haya pasado hambre (y yo, sí vivo en Vallecas). La solidaridad de las personas que han contribuido en operaciones kilo que han surgido para recoger alimentos, las empresas que han destinado excedentes de producción a paliar necesidades ha sido espectacular. Eso sí se refleja en el libro muy bien, la crisis económica ha sido una explosión de generosidad. Pues como iba diciendo, esa historia, la más irreal de todas, tiene las dos mejores frases del libro, y una detrás de la otra:

«-Hay que ser muy valiente para pedir ayuda, ¿sabes? Pero hay que ser más valiente todavía para aceptarla».

Así, que, si eres un cobarde en la vida, abstente de leer este libro.

Consta de tres partes: Antes; Ahora; Después. El título te lo explican en la primera parte, así que no te lo voy a decir, si quieres, vas y lo lees.

Ignoro cómo envejecerá esta novela. Porque el tema que trata es actual, porque lo hemos vivido en primera persona. Unos desde un lugar cómodo, otros con ciertas apreturas, y otros lo han pasado y lo pasan francamente mal. Este tipo de novelas con temas actuales es una incógnita.

Según vas avanzando en el libro vas viendo que algunas cosas se van arreglando, se van normalizando. No hay un final feliz, es como un fundido en negro.

Novela publicada en noviembre de 2015, en enero de 2016 va por su 5ª edición. Esta vez la he leído en papel, siempre es bonito volver a sentir las páginas de un libro, tiene una magia especial.


No hay comentarios:

Publicar un comentario